La sensación de falta de tiempo como fuente de estrés
La sensación de falta tiempo es una de las principales causas de estrés laboral. Por supuesto, me dirás, muchas veces no se trata de una sensación, sino que en determinados momentos, realmente NO tienes tiempo para hacer todo lo que necesitas /quieres hacer.
Normalmente, esto se traduce en hacer las cosas más deprisa, ir como pollo sin cabeza intentando capear lo que va viniendo, y acabar con la sensación de estar apagando fuegos.
Las herramientas, metodologías y estrategias de productividad te ayudan a reducir esta falta de tiempo, al aprender a planificar, delegar (cuando es posible), priorizar, decir que no, posponer ciertos proyectos o tareas, automatizar…
¿Se puede gestionar el malestar generado por la falta de tiempo?
También generas un cambio cuando aprendes a gestionar el malestar de la falta de tiempo. Ya que todos experimentamos que es más fácil priorizar, planificar y tomar decisiones cuando estamos tranquilos que cuando estamos estresados.
Mantener la calma, consiste en ser capaz de tomar perspectiva y no dejarse llevar por los nervios de la situación. Empieza por un cambio de pensamiento del “No tengo tiempo” al “¿Qué es lo mejor que puedo hacer con el tiempo que tengo?”.
Tiene que ver con decidir con qué estado emocional quieres responder a tu día a día. Sabiendo que el tiempo es escaso y se va a ir reduciendo. Y, sabiendo también, que responder agobiado, frustrado, enfadado, estresado… a esta realidad, no resuelve nada.
El hábito de visualizar el día

¿Qué pasaría si pudieras elegir como te quieres sentir ante esa sensación de no avanzar en lo planificado, o cuando surge el siguiente imprevisto, o ante esa reunión a la que no quieres acudir?
Visualizar consiste en utilizar tu mente para imaginar cómo quieres actuar, qué quieres decir, cómo te quieres sentir ante una situación.
Las visualizaciones son una herramienta potente.
Se basan en que nuestro cerebro no diferencia lo real de lo imaginado.
De esta forma, al visualizarte a ti mismo en una determinada situación, tu cerebro está teniendo la experiencia de vivirlo de la manera en que lo estás imaginando, por lo que es más fácil responder así cuando sucede en la realidad. Es una forma de entrenarte para lo que va a venir.
Pasos PARA VISUALIZAR EL DIA
Como todos los hábitos, cuantas más veces lo realices más fácilmente lo integrarás y mejor te va a funcionar.
Lo puedes realizar en el momento en que necesites retomar la calma y tomar perspectiva.

Puede ser al principio de la mañana al levantarte (si quieres hacer la viasualización del dia que tienes por delante), justo al llegar a la oficina, antes de una situación que prevés estresante o en cualquier momento en que necesites calmarte un poco y retomar la tranquilidad ante lo que está sucediendo.
- Paso 1: Asegura 5-10 minutos de tranquilidad (el tiempo depende de lo que te cueste concentrarte y de la cantidad de situaciones que quieres visualizar)
- Paso 2: Respira lenta y profundamente, céntrate en las sensaciones al entrar y salir el aire de tus pulmones.
- Paso 3: Trae a la mente la situación que tienes por delante (jornada laboral, reunión…).
- Paso 4: Pregúntate cuál es el objetivo que quieres conseguir con esa situación: resolver algo concreto, mantener la calma, tomar una decisión…
- Paso 5: Imagina, con todos los sentidos, cómo te gustaría responder a esa situación. Puedes imaginarte cómo vas a entrar, qué vas a hacer primero, qué vas a decir, con que emoción quieres sentirte mientras lo haces…
- Paso 6: Vuelve a inspirar profundamente y recuerda las sensaciones que has tenido, manteniéndolas en el tiempo.